En el camino a una UE más ecológica, más digital, más resiliente y mejor adaptada a los retos actuales y futuros, el instrumento temporal Next Generation EU nace como impulso a la recuperación tras la crisis originada por la COVID-19, constituyendo una pieza clave para conseguir los objetivos marcados.
Su elemento central, el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), cuenta con 672.500 millones de euros en préstamos y transferencias para apoyar las reformas e inversiones emprendidas por los países de la UE. Además de mitigar el impacto económico y social de la pandemia de coronavirus, la meta es lograr economías y sociedades europeas más sostenibles y resilientes, y mejor preparadas para los retos y las oportunidades de las transiciones ecológica y digital.
El MRR es un instrumento de gestión directa. Por ello, los desembolsos se efectúan sobre la base de la verificación del cumplimiento de una serie de hitos y objetivos previamente determinados.
En cuanto al criterio de reparto del MRR, se basa en otorgar mayor peso a aquellos Estados miembros con situaciones económicas menos favorables como consecuencia de la pandemia.
Los fondos del MRR se asignan en dos tramos: un 70% sobre indicadores económicos previos a la situación pandémica y el restante 30% se decidirá en 2022, teniendo en cuenta la evolución económica entre 2020 y 2022. Según los indicadores que se usarán, España recibiría un total de aproximadamente 60.000 millones de euros en transferencias no reembolsables y podría acceder a un volumen máximo de 80.000 millones de euros en préstamos.